Una de las más famosas guerras de la antigüedad es, seguramente, la que sucedió en esta ciudad de la actual Turquía.
Una Guerra en Busca de Helena
Convertida en un hecho legendario, la lucha de los griegos unidos en una alianza contra los Troyanos que se transformó en el recuerdo de un suceso legendario y que se convertiría en el tema central de la Ilíada. El transfondo histórico de esa narración es sin duda la destrucción de la ciudad histórica de Troya, con motivo de una guerra entre micénicos y los Troyanos, por el control de las muy rentables rutas comerciales dirigidas hacia el Mar Negro, a través del Helesponto, actualmente denominado estrecho de los Dardanelos.
Este era el Caballo de Troya de la Leyenda
Pero una guerra anónima por el dominio de una vía estratégica resulta un hecho muy poco poético, así que los antiguos griegos se inventaron una historia de amor a partir del rapto consentido de la bella Helena, esposa de menelao, el rey micénico de Esparta, por París, el hijo de príamo, Rey de Troya.
Así era Troya según la Ilíada
Como venganza, los principales Reyes de Grécia, Agamenón, Aquiles, Ulises, Ayax, Néstor, Filoctetes y muchos otros, organizaron una nutrida expedición de barcos y tropas para recuperar a Helena y así castigar la afrenta. La Guerra duró diez años y estuvo llena de todo tipo de anécdotas y sucesos. Tan sólo la astucia de Ulises, hizo que los griegos pudieran tomar la ciudad por sorpresa, al ocultarse un grupo de guerreros en un caballo de madera que abandonaron para que los troyanos lo introdujeran en el interior de la misma; tras abrir las puertas de las murallas, los sitiadores pudieron conquistar Troya y arrasarla. En esta Historia, cómo oís mezclaron para dar mayor esplendor a la obra tanto dioses como hombres, para acabar con una de las ciudades más poderosas del mundo de la época. La conquista de Troya y el accidentado regreso de Ulises a su tierra perduraron a través de los milenios como unas de las grandes "Aventuras de la Humanidad", relatada en la Ilíada y la Odisea, por lo que de ahí salieron los primeros poemas épicos de la cultura Europea.
Firmado Por; Alfred Bonamanta "Historiador y Estadista"
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